La Asociación Isabel Álvarez y el Padre Patricio en el Cerro

Como cada final de curso la Asociación Isabel Álvarez y el Cerro de San Juan se funden en una solidaria y entrañable colaboración con l@s niñ@s del pueblo hondureño, a través de distintas actividades realizadas en nuestra Fiesta Fin de Curso. Pero esta vez recibimos la visita excepcional del Padre Patricio para enseñar a los alumn@s del 3º Ciclo -con imagen y palabra-, la difícil realidad de l@s niñ@s hondureños, por quienes él tanto hace con su entrega diaria.

El Padre Patricio llegó a España para repartir una maleta repleta de cartas de agradecimiento escritas por l@s niñ@s a sus padrinos. Durante los meses de mayo y junio recorrerá lugares tan dispares como: Huelva, Sevilla (Cerro de San Juan), Málaga, Fuengirola, Córdoba, Coruña, Bilbao, Pamplona, Canarias, Valencia, Madrid, Barcelona... e incluso parte de Francia.

El Padre Patricio Larrosa Martos (Huéneja, 1960) está desarrollando una inconmensurable labor en Honduras, un trabajo agradecido por decenas de miles de personas y reconocido a finales de octubre con el premio 'Hoja de Liquidámbar', con el que la alcaldía de Tegucigalpa, capital de Honduras, distingue a ciudadanos o instituciones.

 

   

 

Dos décadas de entrega a los más necesitados en Honduras perfilan su trabajo en el país centroamericano. Allí llegó en 1992 y constituyó, cuatro años después, la asociación Colaboración y Esfuerzo (ACOES), que aglutina a voluntarios de toda España, en especial de su Huéneja natal, Huéscar, Motril, Almuñécar, La Herradura, Íllora, Guadix, así como de la capital y la provincia, además de otras poblaciones españolas.

El padre Patricio, con la valiosa ayuda recibida a través de ACOES, ha levantado colegios y centros infantiles en los barrios más pobres de Tegucigalpa, en los que se atiende a más de 3.000 niños, que reciben enseñanza gratuita y un vaso de leche diario, además de servicio de comedor para los que más lo necesitan. También puso en marcha un sistema de becas llamado 'Proyecto Becas San Miguel' para atender a los niños y que puedan ir a la escuela pública, para quienes busca padrinos en España que paguen 150 euros al año, lo necesario para convertir esta utopía entre los pobres en una realidad. También les presta atención médica. A cambio, el padre Patricio les exige a los niños que aprueben el curso y enviar las notas al padrino, junto con una carta de agradecimiento, una felicitación de Navidad y alguna foto. Otros proyectos educativos a los que se dedica ACOES son el Centro de Capacitación Juvenil, Populorum Progressio, Centros Infantiles, Escuela Santa Teresa y Santa Clara, Escuelas nocturnas, Maestro en casa y Escuelita San Cristóbal. También coordina proyectos de salud y asistenciales, entre otros.

El Padre Patricio nos dejó un mundo muy diferente al nuestro: familias que viven con un euro al día o menos; niños que empiezan a trabajar desde los 6 ó 7 años, quizás antes; niñas que con esa edad ya hacen de madre y cuidan durante el día a sus hermanitos; niños que van a la escuela después de una pesada jornada de trabajo o que envidian a los que sí pueden ir; niños que escasean de todo pero que no pueden pedir nada y nunca piden nada, ni comida; niños que no importan entre la miseria de los adultos y una población mayoritariamente joven; en un paisaje de frondosos bosques -allí los árboles nacen solos y crecen solos- que se incendian durante la temporada seca y se apagan por pura inercia...